A pesar del calurosísimo verano que estamos aguantando en el sur, no estoy deseosa de que acabe pero lo quiera yo o no, los días se suceden incansablemente, el 1 de septiembre se encuentra a la vuelta de la esquina.
Con la llegada de septiembre, la vuelta al cole y los días notablemente más cortos el olor a otoño nos llega en un abrir y cerrar de ojos así que para que no me pille desprevenida empiezo a rumiar adornos, montajes, colores y materiales que vayan con esta estación.
Vamos como diría un diseñador de moda estoy preparando la nueva colección para el otoño-invierno, jajaja... esta claro que semejante cosa me queda demasido grande pero bueno si que intento hacer mis pinitos.
Por el momento como veis si que estoy ampliando bastante la colección de diademas con colores más invernales como el marrón chocolate, el gris perla, el verde intenso y el azul eléctrico que la pasada temporada causo furor y seguro también estará presente en la próxima.
Aquí os dejo una muestra de varios de los diseños confeccionados en marrón chocolate. Como siempre la pequeña Irina me ayuda a exponer el trabajo hermoseandolo con su cara bonita; en ella, al ser rubia, estas diademas destacan mucho pero no desentonan en absoluto; en una bebé o niña morena el color se vería bastante discreto pero muy, muy elegante, lo peor de todo ha sido ponerle el abriguito de punto a la modelo, menos mal que la chica es muy sufrida...
Como observareis he combinado el terciopelo con abalorios de colores intensos con acabado nacarado y forma rectangular, botones chiquitines y los imprescindibles lacitos de diversos tipos.
Bonitas ¿verdad? pues seguiré creando para que tengais donde elegir...